Niños de Palestina
Los compañeros de Raghda Alassar no oyeron la bala
israelí que desgarró el cerebro de la niña de nueve años cuando escribía una
evaluación de inglés. Pero cuando un charco de sangre se esparció por su
pupitre y se derramó por el suelo, un muro de gritos se levantó en el
aula en la escuela primaria de la ONU para niñas en Khan
Yunis.
En ese punto Raghda estaba aún llorando pidiendo
ayuda. Con el tiempo, cuando fue llevada a la sala de trauma de un hospital
cercano estaba callada.
Durante cinco cruciales días el ejército israelí
bloqueó el traslado de Raghda a un hospital israelí con las instalaciones para
ofrecer un rayo de esperanza. Comenzó una infección.
El martes los médicos le decían a su padre, Adnad,
que la niña estaba en muerte cerebral.
“La bala entró por debajo de su ojo y salió por la
parte posterior de su cabeza”, dijo el Sr. Alassar. " Les llevó mucho tiempo
detener la hemorragia, su corazón se paró y le dieron conmociones. Desde ese
momento estaba como un cuerpo muerto, aunque no estaba muerta.”
"Encontraba tan difícil de creer lo que le pasaba a
mi hija. Estaba en la escuela, llevando simplemente una libreta, no un arma. ¿De
que es mi hija culpable- nueve años de edad-, de que para haberle disparado? Eso
es terrorismo de Estado contra toda la población."
En las últimas semanas los israelíes han estado nuevamente preocupados con el terrorismo, desde el asesinato de 16 personas en el autobús explosionado en Beersheba a la matanza de escolares rusos en Beslan, que fueron cubiertos con mantas.
En las últimas semanas los israelíes han estado nuevamente preocupados con el terrorismo, desde el asesinato de 16 personas en el autobús explosionado en Beersheba a la matanza de escolares rusos en Beslan, que fueron cubiertos con mantas.
Durante los seis meses de relativa calma para los
israelíes, hasta los atentados de Beersheba, el ejército israelí asesinó a más
de 400 palestinos. Muchos eran combatientes, pero también están incluidos unos
40 niños por debajo de los 15 años. Los palestinos dicen que esto es también una
forma de terror.
“Siempre estamos escuchando los helicópteros, oyendo
los tanques, oyendo las bombas,” decía Khitam Abu Shawarib, el único trabajador
social en el campo de refugiados de Rafah, en el extremo sur de la Franja de
Gaza.
“Estoy muy apenado cuando oigo que una mujer judía o
niños han sido muertos. Creo que es un error y mucha gente aquí cree que es un
error. Pero lo que los judíos sufren no es nada comparado con el terror que
ellos nos obligan a vivir”.
Los israelíes viven en el temor de ataques
indiscriminados, principalmente de suicidas en autobuses y cafeterías y tiroteos
en los territorios ocupados. Pero ellos están generalmente seguros en sus casas
y tienen más probabilidades de ser muertos en accidente de carretera que por
una bomba.
Al sur de Gaza y en algunas partes de Cisjordania
frecuentemente no hay refugio para los aparentemente implacables e
indiscriminados tiroteos israelíes.
Israel clasifica ciudades de la Franja de Gaza tales
como Rafah y Khan Yunis, y Nablus y Jenin en Cisjordania, como zonas de guerra.
Esto, dice el ejército, justifica el fuego de poderosas y sofisticadas armas en
áreas residenciales o el derribo de un creciente número de casas cada mes, bajo
el pretexto ostensible de buscar los raramente descubiertos túneles para el
contrabando en dichas áreas.
Apenas pasa una noche en Rafah o en Khan Yunis sin
que el fuego de las ametralladoras israelíes que han desmenuzado cientos de
casas, forzando a familias enteras a dormir en una sola habitación interior
tapiando ventanas o construyendo una segunda pared. Mientras otros palestinos
viven entre los escombros de sus derribadas casas, perpetuamente en la línea de
fuego de los soldados raramente vistos en lo alto de las torres desde donde
disparan.
Hace dos semanas Mazen al-Ara, de quince años,
trataba de llevar a sus hermanos fuera del alcance de los tanques y los intensos
tiroteos que se producían alrededor de su casa en los límites del “corredor
Filadelfia”, la frontera de Rafah altamente militarizada.
El ejército había destruido parcialmente la casa
familiar meses antes, pero los Aras tuvieron que vivir allí porque no tenían
dinero para mudarse. Normalmente se refugiaban en una habitación interior cuando
comenzaban los tiroteos, pero esa noche fueron tan intensos que Mazen dijo que
les matarían a todos si permanecían allí.
Cuando dirigía al aterrorizado grupo por la calle,
Mazen fue atrapado por un estallido de disparos. El muchacho murió; los médicos
extrajeron 18 balas de su cuerpo.
Hace pocos días Munir al-Daqas, de diez años, salía
de su casa en el campo de refugiados de Jabalya para ir a visitar a sus abuelos
cuya casa estaba a cinco minutos caminando. Los tanques israelíes estaban en los
lados apartados del campo de refugiados palestinos, en aquel momento nadie vio
ningún peligro en el centro de Jabalya, alrededor de su bullicioso mercado, a la
luz del día.
"Debió ser un francotirador” dijo Kifah, su madre. "
La gente me lo dijo cuando estaba comprando en el mercado. No podía creerlo.
Munir acababa de estar allí conmigo y ahora me decían que estaba
muerto."
La Sra. Daqas desplegó una fotografía del cuerpo
semidesnudo de su hijo en su sepultura. Hay una herida de bala en su pecho y
otra en la ingle. .
En cuatro años de Intifada, el Centro Palestino para los Derechos Humanos afirma que el ejército ha matado a 136 niños palestinos en Rafah y Khan Yunis, un cuarto de los niños muertos durante la sublevación, lo han sido a consecuencia del “fuego indiscriminado, el uso excesivo de la fuerza, la política de disparar a matar y el blanco deliberado en los niños”.
En cuatro años de Intifada, el Centro Palestino para los Derechos Humanos afirma que el ejército ha matado a 136 niños palestinos en Rafah y Khan Yunis, un cuarto de los niños muertos durante la sublevación, lo han sido a consecuencia del “fuego indiscriminado, el uso excesivo de la fuerza, la política de disparar a matar y el blanco deliberado en los niños”.
Las muertes en Khan Yunis y Rafah en las últimas
semanas también incluyen dos muchachos de 12 años, una chica de 15 y un anciano
de 75 postrado en una silla de ruedas, Ibrahim Halfalla, quien fue aplastado
bajo las ruinas de su propia casa por una excavadora del ejército israelí
mientras que su mujer imploraba a los soldados que no avanzaran.
El ejército israelí no ha ofrecido una explicación por el asesinato de la niña Raghda Alassar, pero frecuentemente afirma que las victimas infantiles se ven atrapadas por el fuego cruzado en los ataques palestinos al ejército o a los colonos judíos. (eso aunque la niña fue asesinada mientras se encontraba dentro de su clase en la escuela).
El ejército israelí no ha ofrecido una explicación por el asesinato de la niña Raghda Alassar, pero frecuentemente afirma que las victimas infantiles se ven atrapadas por el fuego cruzado en los ataques palestinos al ejército o a los colonos judíos. (eso aunque la niña fue asesinada mientras se encontraba dentro de su clase en la escuela).
No existían tales batallas cuando Raghda Alassar y
Munir Daqas fueron alcanzados. O cuando una bala atravesó la sala de estar de
Sara Zorob e impacto en su pecho de diez años, matándola instantáneamente.
Los mandos militares israelíes en Gaza han admitido
en el pasado que cuando sus soldados son atacados están autorizados a disparar
aleatoriamente, arriesgando las vidas de los civiles.
"Los niños que son heridos físicamente no son los
únicos damnificados," dijo Usama Freona, un psicólogo de la clínica de las
Naciones Unidas en Rafah. "Los niveles de violencia a los que los niños son
expuestos son elevados”.
"Estamos trabajando en muchas escuelas para tratar a
los niños palestinos. En una escuela cercana a Kfar Darom [un asentamiento judío
en Gaza], todos los niños sufren desordenes por estrés post-traumático. Muchos
de ellos lloran y tienen convulsiones cuando hablan sobre sus experiencias. Hay
muchos casos de niños que se orinan en la cama."
Mohammed Abu Yusuf es orientador en la escuela de Raghda Alassar : "Después de que dispararan a Raghda" dijo, "los niños estaban llorando y gritando. Cinco niñas de su clase todavía no quieren volver a la escuela. Sacamos el pupitre de Raghda y lo sustituimos por otro pero ningún estudiante quiere sentarse allí”.
Mohammed Abu Yusuf es orientador en la escuela de Raghda Alassar : "Después de que dispararan a Raghda" dijo, "los niños estaban llorando y gritando. Cinco niñas de su clase todavía no quieren volver a la escuela. Sacamos el pupitre de Raghda y lo sustituimos por otro pero ningún estudiante quiere sentarse allí”.
Raghda Alassar no es el primer caso de niños
tiroteados en el grupo de escuelas de la ONU en Khan Yunis. El año pasado una
bala cegó a Huda Darwish, de 12 años, mientras estaba sentada en su
pupitre.
La señora Daqas dice que sus otros hijos no pueden
entender la muerte de Munir. " El hermano más pequeño de Munir no comprende que
él está muerto. Piensa que va a regresar después del funeral y pregunta por qué
Munir se fue si habíamos dado “una fiesta” para él. Su hermana de cuatro años
pregunta cada día si vamos a ir a buscar por el mercado porque Munir debe estar
perdido," dice.
La especialista Freona dice que la violencia
constante genera violencia. "Mire a que juegan los niños. La mayoría de los
chicos juegan a árabes y judíos. Muchos quieren desempeñar el papel de judíos.
Ven que los soldados israelíes son los únicos con armas y que son fuertes, a sus
ojos, eso es lo más importante," Y añade: "Ven las armas como una fuente de
poder, la solución para tratar con cualquier problema, el modo de obtener lo que
desean.”
La imagen del niño palestino Mohammed al-Dura, el
muchacho de 12 años tiroteado por los soldados israelíes mientras que su padre
trataba en vano de protegerle del fuego israelí en los primeros días de la
presente Intifada, abrasó la conciencia palestina. Pues, ha venido a simbolizar
lo que ven en la encallecida indiferencia de las fuerzas israelíes para con los
niños palestinos. Pero Abu Shawarib, dice que tiene un impacto añadido en muchos
niños, que ven como un padre es incapaz de proteger a su hijo. "El respeto a la
autoridad se ha destrozado porque los niños ven a sus padres apaleados delante
de ellos”, dice Shawarib: " La autoridad del padre, acostumbrado a pronunciar
una palabra para que el niño obedeciera, se ha roto. El padre parece indefenso
para proteger al niño y el niño cree que está solo”.
Otro resultado de las muertes perpetúas es que muchos
niños esperan una muerte temprana y ofrecen la bienvenida a las perspectivas de
convertirse en un “ mártir”.
"El mártir está en el paraíso, tiene la Gloria de aquí y la del más allá donde todo es mucho mejor que la vida en Rafah," dice, " Los niños ven mucha gente muerta, así que ellos esperan ser muertos. Esto es horrible, que los niños tengan que aceptar la posibilidad de morir”
"El mártir está en el paraíso, tiene la Gloria de aquí y la del más allá donde todo es mucho mejor que la vida en Rafah," dice, " Los niños ven mucha gente muerta, así que ellos esperan ser muertos. Esto es horrible, que los niños tengan que aceptar la posibilidad de morir”
ENTREVISTA CON UNA VÍCTIMA
¿Cuaantos años tenias cuando comienzo la
guerra?
yo cuando nací ya hacia mucho tiempo que esto esta
pasando .
¿algun familiar tuyo a sufrido daños?
si, en general toda mi familia menos mi madre ,
gracias a Alá sigue viva
¿que sientes al ver que el lugar en donde tu te has criado desaparezca cada ves mas?
pus tristeza e impotencia , por que yo no puedo hacer nada al respecto.
¿Dinos , te has acostumbrado a oír por la mañana el sonido de las bombas?
ya es parte de mi vida , es como una rutina para mi . Nosotros los niños no jugamos con juguetes si no con lo que encontremos tirados en la calle .
¿stan duro como pare se?
Es mas duro que de lo que pare se , la gente no hace una idea de lo que sufrimos día a día .
Me gustaría vivir como un niño cualquiera : poder jugar tranquila mente en la calle sin tener miedo , ir al colegio y aprender todo lo posible ( mientras se le cae una lágrima , nos cuenta ) pero yo se que es algo imposible por que la guerra no se soluciona en dos días , sino con tiempo y paciencia .
¿que sientes al ver que el lugar en donde tu te has criado desaparezca cada ves mas?
pus tristeza e impotencia , por que yo no puedo hacer nada al respecto.
¿Dinos , te has acostumbrado a oír por la mañana el sonido de las bombas?
ya es parte de mi vida , es como una rutina para mi . Nosotros los niños no jugamos con juguetes si no con lo que encontremos tirados en la calle .
¿stan duro como pare se?
Es mas duro que de lo que pare se , la gente no hace una idea de lo que sufrimos día a día .
Me gustaría vivir como un niño cualquiera : poder jugar tranquila mente en la calle sin tener miedo , ir al colegio y aprender todo lo posible ( mientras se le cae una lágrima , nos cuenta ) pero yo se que es algo imposible por que la guerra no se soluciona en dos días , sino con tiempo y paciencia .
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